Saltamontes - Eyprepocnemis plorans

Ninfa. Morfológicamente son identicos a los adultos, la única característica que les diferencia es que no tienen complétamente desarrollados los élitros y las alas. Además, al estar en pleno proceso de crecimiento, las formas y proporciones pueden ser algo distintas al estado final de desarrollo.

Cuentan con unas fuertes patas traseras, bastante desarrolladas que les permiten realizar poderosos saltos que les sirven para desplazarse o para huir de sus depredadores. En los ejemplares adultos, la capacidad de salto, la combinan con el vuelo, esto les permite aumentar la distancia, que en algunos casos puede llegar a varios metros.

La capacidad de vuelo es limitada, salvo cuando se produce escasez de sus recursos alimenticios, entonces el organismo del saltamontes libera hormonas para estimular la capacidad de volar, pudiendo así desplazarse largas distancias en busca de comida. Esto sucede principalmente cuando hay un exceso en la población de saltamontes, alcanzando las dimensiones de plaga. Cuando esto sucede, arrasan con cualquier planta que encuentran a su paso.

En la cópula, el macho se pone sobre la hembra y juntan los extremos del abdomen. Mantienen esta posición hasta que finalizan. Este acto dura algún tiempo.