Salticidae

Este es el preámbulo de una serie de arañas, muy parecidas todas ellas pero que por sus dibujos y pequeñas diferencias morfológicas forman parte de la familia de las Salticidae, unas arañas, no muy grandes, con unas capacidades increibles para el salto que lo utilizan para cazar.

Son habituales en las casas de planta baja y de campo, se podría considerar que son domésticas y son el peor enemigo de las moscas. Para el ser humano son inofensivas, por eso, si véis alguna por casa no la matéis, si os resulta incómodo su presencia, lo que podéis hacer es capturarla, la mejor manera, con un vaso la aisláis en la pared o superficie que la encontréis y pasáis un folio entre la superficie y el vaso, una vez atrapada, la podemos trasladar al jardín o la calle. A continuación os añado unos comentarios algo más técnicos obtenidos de Wikipedia.

Los saltícidos (lat. Salticidae) son una familia de pequeñas arañas cazadoras al acecho que destacan por su agilidad en el salto y su vista, inusualmente eficaz entre las arañas. Es una de las familias de arañas más nutrida en especies, con unas 4000 descritas.

Son arañas pequeñas, de pocos milímetros en general, de construcción compacta. Se desplazan a gran velocidad y son capaces de saltos largos y certeros. El cuerpo parece cubierto de pelos que a vez son escamosos, a veces iridiscentes. Los palpos de los machos, pero no los de las hembras, son a menudo grandes y vistosos, empleados durante el cortejo. Las partas anteriores son algo más grandes y sujetan a la presa cuando caen sobre ella.

Cuatro de sus ocho ojos se orientan frontalmente, con los dos centrales especialmente grandes. Son, como en todos los arácnidos, ojos “simples”, pero muy elaborados. Son capaces de enfocar y de moverse, variando su orientación y a veces los mueven rítmicamente para detectar a sus presas. Los ojos frontales proporcionan visión estereoscópica, a la vez que los laterales completan un campo de visión de 360°, así que no necesitan girarse para controlar todo su entorno. Su eficaz visión es excepcional no sólo entre las arañas, sino entre los artrópodos.

Cazan al acecho, acercándose a la presa con breves carreras y deteniéndose para dar el salto final, que puede ser muy largo para su tamaño. Son capaces de saltar con precisión en cualquier dirección, también de lado o hacia atrás. Cuando el tiempo es desfavorable o se acerca la noche, tejen un pequeño capullo que les sirve de refugio.

Fuente: Wikipedia