Más conocida la planta arbustiva de la que procede como cornicabra, debe su nombre a la forma de cornamenta en la que se disponden las vainas de contienen la semilla, las cuales, al abrirse, liberan una especie de plumillas adheridas a la semilla y que en los días ventosos son distribuidas via aérea. Son plantas mediterráneas, de terrenos áridos y rocosos.
Se trata de una extraña flor que al igual que el arbusto en el que florece, muestra su resistencia a la sequía, pues sus pétalos son recios y duros, al igual que sus estambles.
Su extraña forma, para mi gusto, le confiere más belleza aún, pues se trata de un claro indicio de cómo este arbusto ha evolucionado para adaptarse al duro y seco medio en el que habita.
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1 comentario:
La naturaleza es prodigiosa, puede adaptarse a cualquier medio sin perder un ápice de su belleza.
Magnífica la foto.
Un abrazo y feliz por tu regreso.
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